QUÉ ES? ¿FUNCIONA?


La electroestimulación no es una técnica milagrosa, sino que respeta el 


funcionamiento de nuestro cuerpo. 

El principio de la electroestimulación es muy simple y reproduce fielmente los procesos que intervienen en la contracción muscular ordenada por nuestro cerebro. Cuando decidimos contraer un músculo, el cerebro envía una orden en forma de corriente eléctrica que se desplaza a gran velocidad por las fibras nerviosas hasta el músculo, que reacciona contrayéndose.
Con la electroestimulación, la excitación se produce directamente sobre el nervio motor gracias a los impulsos eléctricos perfectamente controlados que garantizan la eficacia, la seguridad y el confort en el uso. De este modo, el músculo es incapaz de notar la diferencia entre una contracción voluntaria (ordenada por el cerebro) y una contracción inducida eléctricamente: el trabajo que se produce es idéntico. ¡Es así de natural!

¿ES PELIGROSO?

En primer lugar, la electroestimulación se desarrolló y su eficacia se demostró en el ámbito médico, como lo atestiguan las numerosas publicaciones científicas existentes acerca de sus diferentes indicaciones. Sin embargo, durante muchos anos, las corrientes no poseían las mismas características que las permitidas por la tecnología actual, lo cual, por un lado, impedía su utilización debido a numerosas contraindicaciones y, por otro lado, limitaba sus resultados debido a la dificultad para alcanzar un umbral mínimo de eficacia. En la actualidad, las contraindicaciones son escasas (marcapasos, hernia abdominal o inguinal, epilepsia, abdomen de mujeres embarazadas) y la eficacia se ha mejorado de manera considerable gracias al efecto combinado del avance tecnológico significativo y de los progresos en el campo de la fisiología.
La calidad de los microimpulsos generados por los estimuladores Compex permite evitar la acumulación de electricidad en los tejidos y el riesgo de quemaduras resultante. De este modo, las aplicaciones de larga duración o incluso continuas, como en ocasiones ocurre en ciertos programas antidolor, no presentan ningún riesgo de sufrir quemaduras.
Tampoco se ha registrado nunca ningún efecto no deseado en quienes utilizan la electroestimulación .             

¿RESULTA DOLOROSA?
En la mayoría de los casos, durante las sesiones de electroestimulación se percibe una simple sensación de hormigueo o cosquilleo provocada por la corriente de estimulación, lo cual resulta inevitable. Sin embargo, la gran calidad de las corrientes Compex garantiza el poder utilizar la corriente de estimulación más cómoda posible.
Consideremos dos categorías de programas que no producen las mismas sensaciones:
  • Antidolor y bienestar: la sensación eléctrica es leve, apenas perceptible para algunas personas. Ésta se limita a hormigueos o cosquilleos, así pues, una sensación completamente confortable.
  • Musculación: para los programas de musculación, la sensación "eléctrica" puede ser más marcada, sin embargo:
    • En la mayoría de los casos, la potencia de las contracciones es lo que limita la progresión, mucho más que la sensación "eléctrica".
    • Además, cualquier usuario se habitúa rápidamente a la sensación que puede percibirse, lo cual permite una progresión bastante cómoda.
¿Por qué se recomienda la utilización de la intensidad máxima tolerable en los programas de fortalecimiento muscular?
Cuando se pretende desarrollar las cualidades musculares, la intensidad de la estimulación es un factor crucial.
Cuanto mayor es la intensidad de la estimulación, más importante resulta la cantidad de fibras musculares que trabajan. Así pues es necesario trabajar con la intensidad máxima que seamos capaces de soportar.
Para progresar, se intentará necesariamente aumentar las intensidades utilizadas a lo largo de cada sesión, así como de una sesión a otra. Éste es el motivo por el cual cuando se realiza con seriedad una sesión de electroestimulación, no siempre resulta agradable ni resulta posible realizar otra actividad de manera simultánea.    

APLICACIONES

Tal vez aún no lo haya escuchado. Sin embargo, con seguridad alguien de su entorno ya ha utilizado o probado alguno de nuestros productos; si no lo ha hecho con el objetivo de mejora del rendimiento deportivo, tal vez haya sido con un fisioterapeuta.
En este apartado encontrará algunos ejemplos de aplicaciones conocidas y reconocidas desde hace mucho tiempo. Así pues descubrirá que la electroestimulación no se limita solamente a fortalecer los abdominales, sino que es indispensable en materia de rehabilitación en numerosas situaciones, permite aliviar dolores provocados por múltiples trastornos, aumentar el rendimiento deportivo o limitar algunos problemas vasculares. En ciertos casos, la electroestimulación es incluso el único modo de llegar a un resultado satisfactorio a ciertos niveles.
 
Aplicaciones utilizadas por profesionales sanitarios para garantizar una eficacia máxima.
Algunos ejemplos de utilización más comunes
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Video de Electroestimulacion para mejorar en carrera: